Hasta que su amigo bien fumado le dijo:
-A tu papá lo tiene la bestia
Bella lo fue a buscar, la Bestia le dijo que si no aceptaba salir con él a la disco, su papa iba a ser, por siempre, su esclavo.
Pero Bella no conocía el secreto de la Bestia, él era un chavo muy guapo, pero estaba hechizado, y si no perreaba con el verdadero amor antes de que se le cayera la última hoja a su planta de marihuana iba a ser así por siempre.
Eso no importó, porque Bella era bien facilota y no se fijó lo feo que estaba la Bestia, ella sólo quería perrear.
Dijo que sí y fueron a la disco, la Bestia se fumó un toque con las últimas hojas mientras perreaba y volvió a ser el chavo de siempre. Pero a Bella no le gustaba la mota y lo indujo a activar.
Así fueron felices activos por siempre.