4) Para el turista ambicioso y amante de las emociones fuertes hay una serie de poblaciones en las que se producen linchamientos más o menos periódicamente--a razón de uno o dos por semana. Este tipo de acto tiende a convertirse en un fenómeno casi tan frecuente como las tediosas fiestas religiosas o patronales. Existe una red de información acerca de estos procedimientos, y las comunidades suelen enterarse de determinado caso con cierta anticipación. Poder asistir a uno es, como suele decirse, cuestión de suerte y paciencia.
5) Para presenciar lapidaciones, azotes y otros castigos físicos menores como el consistente en obligar al inculpado a cargar sobre los hombros piedras o ladrillos mientras permanece, al sol y en plaza pública, hincado de rodillas sobre tapitas de botella (la parte afilada hacia arriba), el altiplano occidental tiene, de lejos, la mejor oferta. Las cámaras de fotos o vídeo no están prohibidas para los espectadores y hasta son bienvenidas. Por otra parte, los organizadores suelen informar a los noticieros locales, de modo que algunos de estos eventos son difundidos por la prensa y la televisión.
6) Para turistas de la tercera edad sugeriríamos experiencias menos intensas y más seguras —como ver las cuadrillas de hombres enmascarados con pasamontañas o pañuelos y armados con garrotes, machetes y alguna que otra arma de fuego, que hacen rondas nocturnas en poblaciones tan grandes como San Juan Sacatepéquez o tan turísticas como Panajachel, Atitlán.
7) Si el viajero es un urbanita y la idea de incursionar en el paisaje le produce bostezos, la llamada Zona Viva de la ciudad de Guatemala es el sitio indicado, siempre que el budget lo permita. Cientos o quizá miles de jóvenes han visto en la noche guatemalteca ejecuciones en vivo durante los últimos meses. Los fines de semana son preferibles; las probabilidades de ser testigo de un tiroteo son en realidad halagüeñas.
8) Por último, si el viajero es atacado, no debe resistirse. Cuando, en su opinión, haya alguna esperanza, aconsejamos la rápida huída.
Cuéntele a la gente que se quedó en casa lo que ha visto entre nosotros.
¡Y vuelva con sus amigos! Este país, este pueblo les necesita.
FIRMA: el Comité civil pro turismo solidario
Nota: Si mandas un correo a la siguiente dirección [censurada] te indicaremos algunos sitios donde puedes comprar armas y municiones para una gira más avanzada y otros donde venderlas o donarlas antes de salir del país.
[1] “Guatemala presenta indicadores de violencia de los más elevados de América Latina, que superan al único país que continúa viviendo un conflicto armado interno en la región, Colombia. Guatemala viene experimentando un deterioro pronunciado en los niveles de violencia desde 1999, medidos con base en el crecimiento de los homicidios totales y la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes [52 en el 2009].” De: Informe estadístico de la violencia en Guatemala. MAGNA TERRA EDITORES, Guatemala, 2007.
[2] Según estadísticas de la Corte Suprema de Justicia guatemalteca, en lo que va de este año se han registrado 110 casos de linchamiento.