‘El Pareja’
Contemplar la esquina de polvorientos matices con cadáveres recostados sobre la acera. Reescribir los nombres en mi cabeza. Rechazar el pánico. Poner mente en blanco. Olvidar instantes. Sumar una conjetura, restar una posibilidad. Probar hipótesis. Perseguir el automóvil. Dialogar con los testigos. Más víctimas, menos justicia. Pronto, pronto, pronto, cierra la edición...
En febrero del 2008 se reportó el fallecimiento del periodista José Luis Villanueva Berrones, quien trabajaba en la sección policiaca del periódico El Expreso de Tamaulipas. Fue encontrado con signos de asfixia en su casa, sin conocerse hasta aquel entonces el móvil de su muerte, de acuerdo con datos proporcionados con el Informe Buendía 2008.
Su alías era el Pareja y fue calificado por el Centro de Noticias de Tamaulipas como un hombre “ejemplar y entusiasta en su trabajo”. El testimonio de sus colegas, como Heriberto Gámez, reportero de Ciudad Victoria del periódico Hoy Tamaulipas, lo describen como gran amigo que se caracterizaba por su alto sentido de la solidaridad, pues, a pesar de estar cubriendo la nota de algún accidente, siempre mostraba su disposición para ayudar a los grupos de paramédicos para atender a las victimas de accidentes e incluso proporcionaba atención a los involucrados ofreciéndoles su apoyo moral.
A decir del propio Heriberto Gámez, el Pareja fue un gran padre y esposo, respetuoso de su madre y toda su familia. Razón por la cual, asegura, se le recuerda con cariño.
El 6 de julio del 2005 se documentó una amenaza en contra de Villanueva Berrones. De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas [PGJT], policías ministeriales localizaron un muñeco de trapo atado de pies y manos, vendado de los ojos y amordazado con un mensaje para nuestro periodista: “Vengo por la plaza. Para todos aquellos que no creen que existimos, le dejamos este muñeco a Villanueva, del Expreso. Vamos tras de ti. Triangulo de la Muerte (sic)”, rezaba la leyenda del muñeco que apareció colgado de un puente peatonal. Por estos hechos el Pareja interpuso una denuncia formal.
Tal amenaza fue retomada por diversos medios de comunicación a nivel nacional e incluso internacional. La Sociedad Interamericana de Prensa envió un comunicado donde exhortaba a las autoridades de Tamaulipas a investigar los hechos contra el periodista: “Es imperativo investigar el incidente dado que se registró en Tamaulipas, que se ha convertido en una de las zonas de México más afectadas por la violencia contra los periodistas”, se leía en el comunicado, donde también se instaba al Gobierno Federal a poner en marcha a los representantes de los ministerios públicos en las delegaciones estatales de la Procuraduría General de la República, quienes se ocuparían exclusivamente de los casos de agresiones o amenazas en contra de periodistas.
En julio de ese mismo año, la PGJT informó que Jorge Adán Meléndez Meléndez, de 23 años de edad, se acreditó dicha amenaza, la cual se había tratado de una broma de un grupo de jóvenes en contra del periodista. El grupo de amigos seleccionó al azar el nombre de Villanueva Berrones, pero al conocer el avance de la investigación decidieron entregarse por cuenta propia. Incluso planeaban cometer más amenazas en contra otros reporteros de la fuente.
Posterior a su muerte, se especuló sobre un posible suicidio. Finalmente, todo se aclaró con investigaciones de la PGJT y de acuerdo con el informe Buendía 2008, oficialmente, Villanueva Berrones se quitó la vida.
Con todo, diversos reportes, como el recabado por la revista Contralínea, contabilizaban, hasta 2012, una lista de 109 periodistas asesinados o desparecidos desde que el Partido Acción Nacional arribó a la Presidencia de la República, donde Villanueva Berrones ocupa el número 45 del total de crímenes cometidos contra comunicadores. En su mayoría impunes y sin investigar.
