En el periódico El País, el 21 de agosto, el reportero Salvador Camarena señaló que a México se le estaban acabando los "nunca antes...", a raíz de la suspensión en Torreón del partido de futbol Morelia contra Santos por una balacera al exterior. Esta afirmación me impactó profundamente. Tantos muertos, tantas muertas, tantos niños huérfanos, tantas niñas que han visto un asesinato, tanto jóvenes involucrándose en el crimen (organizado o no), tantos desaparecidos, tantas familias buscando a sus hijos, hijas, maridos... ¿Qué otros “nunca antes” nos esperan? No puedo ni siquiera imaginarlo, por eso al igual que NAR, me uno a la no celebración de su primer año, porque ojalá no existiera, pero por otro lado, es un espacio privilegiado para informarse, reflexionar y compartir. En este sentido, sí celebro su existencia porque si bien no están en nuestras manos muchas cosas que quisiéramos evitar, sí está el crear una red solidaria, crítica y abierta que, quiero creer, nos permitirá, además de no permanecer indiferentes, hacer algo, no sé qué, en un futuro muy cercano.
