Ella le preguntó: ¿"Vino usted solo?", Él le contestó: "Sí, señorita". A lo que ella añadió con un nudo en la garganta camuflajeado con una sonrisa: "Yo estoy con usted". En ese momento llegaron 7 personas, una familia, los papás, el abuelito, dos hijos adolescentes y dos hijas y se colocaron a ambos lados de los recién hechos compañeros. El padre de familia empezó a conversar con el guerrero y le dijo: "Mi familia y yo lo acompañamos en su pena".
Ahó, Ciudad de México
Poema de David Huerta al terminar la marcha en el Zócalo de la Ciudad de México
Lo que no me gustó, incómodo y raro a mi gusto, es que desde el contingente de Sicilia y hasta unos 50 metros atrás, se formó un cordón (con mecate y todo) que separaba físicamente a los marchistas a pesar de ir todos juntos, algo ridículo y que no se quitó hasta el final.
Algo chistoso es que el contingente de la UNAM y Poli, no respetaron el silencio en la marcha y hasta batucada hubo. En el segundo descanso se acercó alguien con un megáfono a decir lo siguiente:
-Compañeros, estaremos 10 minutos para descansar y después avanzamos. Por favor guarden silencio que el espíritu de la marcha que convocó Javier Sicilia...
-¡La marcha no es de Sicilia! - gritaron varios
Tenían razón. El del megáfono agradeció la atención, derrotado, y se retiró. La marcha no es de nadie, es de todos. Me gustó.
Se repitió un mensaje a lo largo de los carteles: "Algunos padres son poetas. Todos los hijos son poesía" Y la poesía de la marcha se dejó oír sin guardar silencio.
Gustavo Arciniega, Ciudad de México
Entrada de la marcha en Ciudad Universitaria e interpretación del Requiem de Mozart
Soy originaria del Estado de Chihuahua, por lo que se podrán imaginar mi sentir cada día cuando gracias al Internet puedo accesar El Diario de Chihuahua, que es un periódico local y me entero de los lamentables sucesos de mi ciudad. Violencia, secuestros, asesinatos ya no solamente entre delincuentes, sino que ahora también están asesinando jóvenes, niños y hasta bebés que ninguna amenaza pueden representar a sus intereses.
Mi familia vive en Chihuahua, por lo que vivo con el miedo y la incertidumbre de pensar que algo pueda pasarle a mi madre mientras hace las compras, a mi hermana en camino al trabajo o a mi sobrino mientras regresa de la escuela.
Este problema ya no es algo que vemos en las noticias esporádicamente, creo y puedo asegurar que ya TODOS hemos sido víctimas de esta guerra; ya no es el primo del vecino del cuñado quien fue secuestrado o asesinado, ya todos hemos estado en un funeral de un familiar, de un vecino o de un amigo. Todos hemos perdido a alguien, y lo más triste es que también estamos perdiendo nuestra identidad, integridad y dignidad como personas.
Karla Chávez, Minnesota, EEUU
Lectura de un manifiesto de los mexicanos en Berlin en el centro de Amsterdam
Ante el imperativo del silencio, los ciudadanos que marchamos en Xalapa nos expresamos a través de mantas, cartulinas, pendones. Desde una sentencia de Gandhi: “Lo más atroz de las cosas de la gente mala, es el silencio de la gente buena”, hasta exigencias y reclamaciones: Paz con justicia y dignidad, Justicia para todos, Paremos las balas. Nuestra propuesta: cultura y educación.
Para construir la paz necesitamos: educación, salud, ingresos, democracia, Por los miles de mexicanos y cientos de inmigrantes, muertos, torturados, desaparecidos, presuntos culpables, una comisión de la verdad. No + violencia e impunidad, Más tortillas, menos balas, “Más poesía, menos policía”, Javier Sicilia, pasando por las declaraciones: ¡¡Todos estamos de luto!!, No a la estrategia de la mano dura, asesina de inocentes, amiga de la mentira y la complicidad, hermana de la violencia y la impunidad, Todos los jóvenes muertos. Todos los jóvenes corrompidos. Todos son nuestros hijos, Nos sobran los motivos, Estamos hasta la madre.
Si esto no es una guerra ¿qué es?, 40,000 mil muertos + ¿cuántos desaparecidos? Ya basta, No + sangre. México no es funeraria, Ayudarnos no es matarnos. [...] Exigimos justicia. La verdad es nuestro derecho.
Nadia Medina, Xalapa
Entrevista a Emilio Sanchez en la Plaza Dam de Amsterdam
Fué una manifestación única. Me apersoné en la embajada con un corazón compuesto por unos cinco mil metros de hilo rojo. No hay registro. Algunos transeúntes miraron curiosos. Había partido de fútbol, un clásico. Como activista soy única. Estaba sola. Sola sola.
Cecilia Vignolo, Montevideo, Uruguay
Testimonios de familiares de las víctimas en el Zócalo de la Ciudad de México
Te quiero comentar que el evento ha sido considerado como algo muy especial toda vez que los gobiernos locales de Mesilla y Las Cruces Nuevo México se pronunciaron a solicitud del Comité Amigos de Emilio en una Proclama de solidaridad con los mexicanos a causa de la violencia que se registra diariamente. El evento tuvo una asistencias registrada de 120 personas anglosajonas que en su mayoría desconocían el grado de extermino que se registra en nuestro país, lo que les causo un impacto, en algunos casos "terrible".
Al evento acudió también el connotado escritor Charles Bowden, autor de los libros "Ciudad del Crimen" y "El Sicario", axial como autoridades del Condado de Mesilla, del Centro de Estudios Latinoamericanos.
El Comité, con relación con algunos derechohumanistas y victimas de la estupida guerra de Calderón se están organizando para plantear al señor Sicilia, que el evento a desarrollarse en Ciudad Juárez, se realice en el área de Anapra, y en el muro que divide a ambos países para que s de una muestra de la cantidad de exiliados que ha arrojado la guerra calderonista, la cual nos causa un enorme dolor y que nos obliga a seguir trabajando porque se logre la paz tan anhelada.
Emilio Gutiérrez, La Mesilla, EEUU
Representación del grupo Molécula Artística en la marcha llevada a cabo en Chicago
El indignado grito de “estamos hasta la madre” retumbó hasta Buenos Aires. En una soleada tarde otoñal, un centenar de mexicanos y argentinos se sumaron, con toda su fraternidad a cuestas, al clamor lanzado por las decenas de miles de personas que se concentraron en el Zócalo de la ciudad de México en el fin de la Marcha Nacional por la Paz con Justicia y Dignidad.
Mientras la marcha avanzaba hacia el punto exacto en el que hace siglos comenzó la fundación de lo que hoy es un país adolorido, a diez mil kilómetros de distancia voces principalmente jóvenes compartían la emotiva carta del poeta Javier Sicilia que resumió el agotamiento moral de gran parte de la sociedad mexicana por los resultados de una guerra contra el narcotráfico que nadie les consultó, pero que ya afectó a todos con su interminable estela de muerte.
Los organizadores fueron, en su mayoría, estudiantes que eligieron alguna universidad argentina para realizar maestrías o doctorados, pero que no usan la distancia como pretexto para desentenderse de su país. Como Rafa, un chico de 24 años que, vestido con la camiseta de Los Pumas como declaración de principios, leyó la ya famosa carta y expuso a quienes se iban juntando los pormenores de un conflicto “en que la sociedad civil queda en medio, atrapada entre un crimen organizado que cada vez va matando de peor manera, y del gobierno federal, que no reconoce sus errores y que sigue llamando ´daños colaterales´ a las víctimas inocentes de su guerra” [...]
La comunidad mexicana en Buenos Aires es muy reducida, pero el afecto hacia el país se reproduce a través de los “argenmex”, aquellos que desde el exilio que tuvieron que sufrir en la última dictadura militar comenzaron a construir lazos de unión con los mexicanos que nunca dejaron de recibirlos con los brazos abiertos. Además, los argentinos ya vivieron, en otra negra y no tan lejana época, el dolor por los desaparecidos, las ejecuciones y el descubrimiento de fosas comunes con decenas de cuerpos no identificados. Saben muy bien lo que es el terror y lo que es luchar durante décadas por la justicia que hoy se exige en México.
Cecilia González, Buenos Aires, Argentina
Marcha por la Paz en Torreón, Coahuila
Hemos querido hacer esta manifestación frente a la Casa Blanca para solidarizarnos con los familiares de las víctimas en México", aseguró Ricardo Juárez de la organización Mexicanos sin Fronteras, durante un acto que contó con la presencia de un reducido grupo del Distrito de Columbia y otros que llegaron desde los vecinos estados de Virginia, Maryland, Carolina del Norte, Delaware y Nueva Jersey.
El Universal
Manifiesto leido en la Marcha por la Paz en Berlin, Alemania
Nuestra intención es demostrar que como mexicanos en el extranjero, estamos inconformes con la violencia del narcotráfico, y con los casi 40 mil muertos que ha causado.
Mitzi Hernández, Nueva York, EEUU
Marcha por la Paz en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
Distintas organizaciones y grupos de Mexicanos, en colectivos e independientes (alrededor de dos centenares) manifestaron hoy, día 8 de mayo, en la Plaza del Trocadero en Paris a las 17 horas. Entre las actividades de los grupos independientes destaco la de "ni uno mas" en la que se propuso enviar cartas a Felipe Calderón poniendo en cada una de ellas el nombre de una de las victimas de esta guerra que cobra las vidas de civiles: hombres, mujeres y niños.
Estuvieron presentes el Comité de Solidaridad con los Pueblos de Chiapas en Lucha (CSPCL), les "Trois passants" y el grupo de jaraneros:"Cascabel" , quienes animaron el evento hasta el momento de marchar para ir a depositar las cartas al correo, aproximadamente a las 18:45 hrs. Hubieron pancartas con consignas como: "no mas sangre"; "ni uno mas"; "Alto a la guerra de Calderón".
Karla Sandoval, Paris, Francia
Marcha por la Paz en Hamburgo, Alemania
Hubo una muy buena respuesta a la convocatoria por parte de una ciudadanía consciente de la grave situación que vive el país, lo cual se expresó en numerosos cárteles y mantas que hablan del "No a la Ley de Seguridad" que convertirá al país en un Estado policiaco-militar, de la corrupción y la impunidad entre los funcionarios de los 3 poderes, del "NO" a la guerra y a la militarización, etc. Se formó un contingente que abarcaba cerca de 4 cuadras. En la lona que imprimimos y que fue al frente de la marcha tratamos de dar información sobre los resultados de esta guerra, sobre lo que como ciudadanos exigimos al gobierno, sobre lo que no se está haciendo para combatir el narco y sobre quien financia esta guerra y obtiene ganancias [...]
Hubiéramos querido poder hacer más pero éramos muy pocos los que estábamos en estas acciones de organización y teníamos además un grupo tratando de entorpecer la labor, cuestión que logró en determinado grado porque provocaron en dos momentos tensión y confusión. El primer momento fue cuando ese grupito trató de imponer que un grupo de danzantes hiciera un ritual deteniendo la marcha. Este grupo de danzantes llegaron cuando la marcha ya entraba sobre la Ave. Independencia, se colocaron al frente porque querían ser la parte principal de la marcha y se pusieron a llevar a cabo en ese momento un ritual con ofrendas que no teníamos siquiera idea cuanto podía tardar y deteniendo la marcha. La mayoría de la personas estaban molestas porque estábamos a pleno sol con niños y personas mayores entre los participantes y porque sólo la primera fila de la marcha estaba observando dicho ritual mientras el resto no entendía que estaba pasando, además de que la marcha había quedado entorpeciendo el paso completo de un crucero principal en el centro de la ciudad.
Ante la protesta y el señalamiento de que estaban tratando de boicotear la marcha, después de unos 8 o 10 minutos dieron por terminado el ritual, pudimos volver a avanzar y los danzantes aceptaron ir detrás de la manta y de la bandera y no al frente. El segundo momento fue en el Zócalo donde buscaron evitar que hicieran uso del micrófono personas ajenas a ese grupo y tratando de que quienes trabajamos en la convocatoria y queríamos aprovechar el momento para tratar de lograr mayor consciencia sobre la necesidad de mantenernos enlazados, de buscar información alternativa, etc. no pudiéramos hacer uso de equipo de sonido. Afortunadamente si logramos recabar algunos datos de los participantes, pero en menor escala de lo que pudo haber sido, porque estos momentos de jaloneos, tensión y confusión provocan temores entre los asistentes y tienden a retirarse.
Silvia, Veracruz
Marcha por la Paz en Morelia, Michoacan
Además del gobierno, tenemos que voltear a nosotros mismos también, porque hemos dejado de comprender a mucha gente, hemos dejado de ser compasivos, y a la gente que tiene menos recursos que nosotros, ya sea emocionales o económicos, los hemos dejado caer; no sólo el gobierno. Tenemos que unirnos, independientemente de religiones e ideologías, tenemos que dejarnos de confrontaciones, necesitamos unirnos [...] de nada sirve hacer un movimiento si seguimos pensando que los demás son unos estúpidos, porque no piensan como nosotros; qué tiene que tengamos diferencias, pero tenemos que unirnos verdaderamente.
Jaime Romero, Ciudad Juárez
Performance en Marcha por la Paz en Londres, Reino Unido
Yo estaba presente cuando el regidor panista se acerco a nosotros y empezó a gritarnos con altanería y prepotencia que quitáramos nuestra pancarta o nos pasáramos atrás o todos los trabajadores del municipio desertaban, a lo cual nos negamos y se pasaron adelante de nosotros y seguimos nuestra verdadera marcha, en total no sé cuanta gente originalmente venía con nosotros cuando llegamos al parque de palacio municipal, la mayoría de funcionarios estaba debajo del edificio y nosotros nos fuimos al asta bandera y montamos nuestro altar y fue ahí donde concluimos la marcha.
Ixchel Germandez, Cozumel
Marcha por la Paz en San Cristobal de las Casas
Hubo mucha gente, unas doscientas personas o más. Estuvo muy animado. Al principio se habló del problema de la justicia y la dignidad en México. Se marchó un tramo acompañado de música brasileña y luego hubo silencio. Al final, alguien leyó un poema.
Alex Lambarry, Montreal, Canadá
