A+ A A-

Octubre en Jalisco: No murió, nos lo mataron

Ricardo de Jesús Ricardo de Jesús Ricardo de Jesús

Octubre no se olvida porque en este mes los ciudadanos de Jalisco, en todo el estado, volvieron a tomar las calles con un decidido: YA BASTA. Se sumaron a las protestas nacionales por #Ayotzinapa pero recordaron que AQUÍ también hemos sumado dolorosamente muerte, desapariciones y fosas clandestinas. Jalisco, de una y múltiples formas, también es #Ayotzinapa porque aquí también nos han matado a un estudiante, Ricardo de Jesús Esparza. Así fue octubre en Jalisco.

 

Jalisco también es #Ayotzinapa

La manta que es detenida por unas manos que nunca dejarán de buscar dice: “En Jalisco hay miles de desaparecidos. Corrupción, indiferencia e injusticia denuncian las mamás de los desaparecidos. Exigimos justicia”. 

Ellas, las madres y familiares de los desaparecidos, acudieron a la marcha celebrada el 8 de octubre en apoyo a los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de #Ayotzinapa porque saben que es necesario que se mire y reflexione hacia dentro porque aquí también hay miles de familias que tampoco saben nada de los suyos porque acá en Jalisco, las autoridades dicen que los buscan pero ellas saben que no es así.

Natividad busca a su hija Dalia Cruz Guerrero de la que no sabe nada desde el 30 de octubre de 2010. Guadalupe no ha cesado la búsqueda de José Luis Arana Aguilar, quien desapareció el 17 de enero de 2011. Susana pide se encuentre a su esposo Álvaro Corona Piceno, quien desapareció el 3 de agosto de 2012. Mayra anhela reencontrarse con su hijo Antonio Reynoso Hernández, llevado por la policía el 30 de agosto de 2013.

Más tarde se unió a ellas, Sonia Bejines quien busca a su hermano Marco Antonio Bejines, el cual desapareció de su propio negocio de bicicletas la mañana del 6 de septiembre de 2014. Marco Antonio era una persona dedicada a su familia y a su negocio. Nada debía.

Su ayudante y único testigo de su desaparición, narró a la familia cómo Marco Antonio fue llevado por quienes dijeron pertenecer a la policía anti-narcóticos. Ellos dijeron su nombre completo y le pidieron que los acompañara porque tenía que testificar: ¿de qué o sobre qué? Nadie lo sabe porque Marco Antonio no fue presentado en ningún ministerio público ni fue entregado a la Fiscalía General o la delegación de la PGR en Jalisco.

La Familia Bejines, al igual que el resto de las familias de desaparecidos, ha iniciado por sus propios medios la búsqueda y ha insistido una y otra vez que se investigue por qué esos policías se llevaron a Marco Antonio. Incluso, han pedido a la Fiscalía que les dé a conocer el registro de las cuatro cámaras que están instaladas en las cercanías del negocio porque ahí se podría ver el rostro de los captores y las placas del vehículo en donde se lo llevaron; sin embargo, sólo dicen que checarán eso de las cámaras.

Mi hermano no era un delincuente, tenía un negocio y era entrenador de niños en el parque San Rafael. Su vida eran las bicicletas, su vida era su familia por eso no nos explicamos por qué llegaron esos policías con armas largas a llevárselo”, expresó su hermana Sonia. Ese día de la marcha por #Ayotzinapa, ella y toda su familia salieron porque ya no pueden con esta incertidumbre y con esa desazón de enfrentarse a una autoridad que simplemente no investiga las desapariciones.

Esta primera marcha congregó a más de siete mil personas. Sus voces, sus demandas, sus consignas hacían eco un reclamo y esperanza: “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”. Ellas, las madres de los desaparecidos de Jalisco, se sintieron apoyadas y consideraron que esto que pasó en #Ayotzinapa podría ser el vórtice para que este país, por fin, voltee a ver a sus desaparecidos, esos que en Jalisco se suman uno a uno hasta llegar a 2 mil 133, según la cifra oficial. El conteo del colectivo Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco asciende a más de seis mil.

 

No murió, NOS LO MATARON

Ricardo de Jesús, de 23 años, era estudiante de noveno semestre de ingeniería mecatrónica en el Centro Universitario de Los Lagos perteneciente a la Universidad de Guadalajara (UdeG) y ubicado en el municipio de Lagos de Moreno. 

El 17 de octubre se organizó con unos amigos para acudir al Festival Cervantino sin saber que la noche del sábado 18 de octubre, éste sería detenido por elementos de la policía municipal de Guanajuato, quienes se lo llevaron esa noche pero nunca lo presentaron a ningún ministerio público. Sus amigos lo buscaron, pero no fueron ellos quienes encontraron a Ricardo de Jesús. A él lo hallaron vecinos del callejón Peña Grande, pues en el patio de la casa 28 apareció su cuerpo sin vida. Era la mañana del 19 de octubre.

¿Cómo llegó ahí? ¿Quién lo abandonó en ese sitio? ¿Por qué se lo llevaron los policías? ¿Por qué no lo entregaron? ¿Qué pasó después? No lo sabemos.

Lo que ha sido urgente decir y aclarar, por parte de las autoridades de Guanajuato, es que Ricardo de Jesús no fue detenido por policías municipales porque nunca fue presentado en ninguna comisaría. Incluso se insistió en que la muerte del joven universitario pudo darse por dos motivos: 1) cayó al intentar introducirse al domicilio en que fue encontrado y 2) cayó porque después de ser detenido y soltado por los policías éste decidió subirse inexplicablemente a una barda de la cual cayó.

Al menos, estas son las dos hipótesis que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Guanajuato ha presentado a los medios y a la propia familia de Ricardo de Jesús. Las pruebas de la PGJ son unas fotografía y unos videos extraídos de las cámaras de seguridad que hay en Guanajuato, en ellas se ve a un joven arriba de una barda, ellos aseguran que es Ricardo. Sin embargo, nada de esto es creíble para la familia de Ricardo ni para sus amigos y testigos presenciales, pues ellos vieron cómo Ricardo fue llevado por los policías municipales, después de que éstos en una revisión de rutina los retuvieron exigiendo dinero para no ser detenidos. Ricardo de Jesús se negó; por ello, creen que se lo llevaron.

Las explicaciones de la PGJ, hasta el momento, no han estado del lado de la víctima sino de los presuntos responsables, pues si bien se excusaron de la criminalización inicial que hicieron de Ricardo no han dado a conocer el nombre de los policías involucrados en la detención ni tampoco han expresado por qué si aparentemente detuvieron a Ricardo por una supuesta falta administrativa no lo trasladaron a una comandancia.

La PGJ no ha dicho qué fue exactamente lo que pasó entre la detención de Ricardo y su hallazgo en el callejón de Peña Grande. Sus explicaciones son inconsistentes porque en esos mismos videos se ve a Ricardo hablando por celular alrededor de las cuatro de la mañana, siendo que el celular de éste mandaba a buzón desde dos horas antes, pues sus amigos al no encontrarlo nunca dejaron de llamarlo. Es curioso que las autoridades digan que esa hora éste hablaba por el celular cuando se dio a conocer que la hora de muerte de Ricardo sucedió aproximadamente a las dos de la mañana. Hora que después fue modificada como aseguraron amigos de Ricardo en entrevista con la periodista Dalia Souza en Señal Informativa Lagos de Moreno.

Daniel de León fue compañero de Ricardo de Jesús en el Centro Universitario de Los Lagos. Compartió con él muchas cosas, entre ellas, esa detención arbitraria (la policía prefiere llamarla de rutina) que sucedió la noche del 18 de octubre.

Daniel declaró a la PGJ de Guanajuato que el día de los hechos Ricardo, un amigo y él estaban juntos, pero se detuvieron porque uno de ellos se encontraba con algún molestar. Ricardo de Jesús fue a buscar un baño, mientras él estaba ausente un par de policías interpelaron a Daniel para hacerle una revisión y exigirle que se retirara del lugar. 

A lo lejos, Ricardo de Jesús lo observó todo y pidió a los oficiales una explicación de lo que estaba pasando. Por la espalda, como los cobardes, llegaron dos policías más que lo tomaron del cuello y del brazo: “Se lo llevaron detenido, a mí no me dejaron acercarme a él, me dijeron que me retirara, que me fuera… para eso me estaba cuidando un oficial para que no me arrimara… yo corrí para darle la vuelta a la cuadra para localizar a mi amigo, para saber en qué patrulla lo subían… desgraciadamente no pude verla y ese fue la última vez que lo vi con vida”, narra Daniel con esa impotencia que debió sentir cuando tras correr no logró alcanzar a su amigo. Se lo habían llevado los policías.

La búsqueda de Ricardo de Jesús fue inmediata. Todos se fueron a la comandancia, pues queríamos saber dónde estaba, querían pagar su multa, pero nadie les decía nada porque simplemente Ricardo de Jesús nunca llegó, nunca lo llevaron: “Regresamos al punto de reunión esperando lo mejor, lo esperamos de más, lo esperamos muchas horas pero nunca apareció. No contestaba su celular… eso es todo”, dijo Daniel con esa voz desconcertada de un joven que no sólo perdió a su amigo sino que también, al ser uno de los testigos presenciales, siente la presión de las autoridades y los medios. “Eso es todo…”, dijo como queriendo salir de una situación que recién inicia.

Este testimonio, sin embargo, no ha sido suficiente para las autoridades de Guanajuato que no dejan de insistir en que la muerte de Ricardo de Jesús fue accidental. Como reacción a esto hechos, la comunidad universitaria y las autoridades de la UdeG salieron a las calles el 22 de octubre para exigir justicia para Ricardo de Jesús.

Lo que inicialmente era una marcha a favor de los 43 estudiantes desaparecidos de #Ayotzinapa se convirtió en un reclamo de justicia por los diversos hechos en donde estudiantes, académicos y personal de la UdeG han sido víctimas. Esta Universidad, tiene actualmente a seis estudiantes y un profesor desaparecidos.

Tonatiuh Bravo Padilla, rector general de la UdeG, pidió a las autoridades de Guanajuato que actúen apegados a derecho y de manera objetiva, pues se ha incurrido en acciones criminalizatorias que en nada abonan a la aclaración de los hechos: “Que cese la criminalización de la víctima y de los testigos (…) y que apliquen un correcto protocolo de investigación porque eso es lo que nos llevará a la verdad de los hechos”.

Las autoridades universitarias anunciaron que apoyaran en todo a la familia de Ricardo de Jesús y la de Daniel de León, incluso, éste último está siendo representado por una abogada de la Universidad. “La Universidad no los dejará solos”, afirmó el Rector. Tan no ha dejado de insistir que un contingente de estudiantes se trasladó, el 23 de octubre, a Guanajuato para recordarles a las autoridades: “Que no murió, nos lo mataron”.

Por su parte, la hermana de Ricardo de Jesús, Yanira Esparza, pidió romper el silencio: “Yo les pido a quienes vieron algo que tengan valor y declaren. Nosotros necesitamos saber qué es lo que pasó, pues los medios lo van a tomar ahorita de momento, pero nosotros necesitamos llegar al final para saber qué y por qué le pasó esto a mi hermano”.

 

¿Y si fuésemos nosotros?

No podemos andar sabiendo que ellos no están”, expresó un joven que acudió a la Acción Global por #Ayotzinapa, celebrada la tarde del 22 de octubre. Esta acción también tuvo ecos en otros municipios de Jalisco como Ocotlán, Atotonilco y Lagos de Moreno.

La exigencia con vida de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Brugos” se dejó sonar con fuerza una vez más en unas calles tapatías. Esta marcha fue comandada por los estudiantes de las Escuela Normal Rural de Atequiza “Miguel Hidalgo”, escuela que, dicho sea de paso, también ha tenido que padecer las represiones de los gobiernos jaliscienses.

Ellos, los estudiantes de Atequiza, fueron la punta de lanza de una marcha que convoco a miles de jóvenes de diversas universidades que si de algo estaban seguros es que no podían seguir callando tanta indignación y violencia. Aquí en Jalisco, ser joven, ser estudiante, también conlleva un alto riesgo.

Sin embargo, como seguramente nos pasa a todos, estos jóvenes se preguntaron en la marcha qué pasaría si mañana fuesen ellos o nosotros los desaparecidos. La pregunta orbitó en sus mentes, se escribió en sus pancartas de la misma manera que la valentía por tener un mejor país. Su primera tarea fue romper el miedo esa tarde en Guadalajara.

La corrupción se ha traducido en prácticas siniestras. Todos somos víctimas del miedo que provoca el terrorismo de estado. Todos los que estamos aquí queremos un mejor país, pero nos da miedo que nos asesinen y nos gustaría hacer más pero ahí está el temor de ser asesinados; sin embargo, ya es hora de irnos envalentonando en ideas y acciones”, Alberto (23 años).

 

Todo aquí está bien.

El 21 de octubre fue ejecutado el ex alcalde de Cabo Corrientes, Carlos Alberto Orozco Madrigal, quien presidió ese Ayuntamiento entre 2007-2009. Ese mismo día, fueron asesinados los suegros del actual alcalde de Tecolotlán, Francisco Brambila González. El 23 de octubre, la Fiscalía del Estado confirmó la desaparición del regidor panista de Talpa de Allende, Gerardo Francisco Ornelas. La autoridad dice que está investigando. 

Desde que asumió la gubernatura, Aristóteles Sandoval, el 1 de marzo de 2013, en Jalisco han sido asesinados 69 funcionarios públicos. En total han perdido la vida en el estado 2 mil 048 personas. Mil 250 han muerto a causa de un arma de fuego. El Fiscal General, Luis Carlos Nájera, insiste en que no hay focos rojos. Todos son rumores.

Como aquel que se dio a conocer el 7 de octubre, cuando en dos casas de la zona Oblatos se encontró un taller donde se ensamblaban fusiles automáticos. O como en el que se aseguraba que las 50 denuncias de abuso policial cometidas por Fuerza Única Jalisco fueron pagadas por el crimen organizado, pues ellos son incapaces de torturar o extorsionar como afirman los ciudadanos denunciantes. Aquí no hay focos rojos, aunque 25 directores de policías municipales deberán renunciar porque no son confiables.

 

Información adicional

  • Nombre del / de la periodista: : Darwin Franco. Periodista y comunicador. Profesor de la Universidad de Guadalajara y del ITESO. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. / @darwinfranco
  • Fecha: 4 de noviembre de 2014

TESTIGOS PRESENCIALES

ESTADO DE LA REPÚBLICA

DESAPARECIDOS

PRENSA AMENAZADA

RECIBE NUESTRO BOLETÍN

Nombre:

Email:   

NUESTRA APARENTE RENDICION | 2010