NUESTRA APARENTE RENDICIÓN QUEREMOS CONSTRUIR PAZ Y DIÁLOGO. POR ESO ESTAMOS AQUÍ

Estaba de pie, como un guerrero solitario orgulloso de una estirpe que el destino, la injusticia y la impunidad le arrebataban de las manos, estaba solo, en sus manos tenía una pancarta en la que se leía: "Mi hijo fue asesinado y las autoridades no hacen nada", miles de personas pasaban frente a él y él inmóvil hacía frente al mar de gente que se acercaba poco a poco vaticinando la llegada del poeta, que como él, también perdió a un hijo en una situación poco clara [...]

¡Paz, qué bonita palabra! Solía pensar cuando era pequeño al ver la “a” viviendo en armonía entre dos consonantes. Luego me enseñaron las maestras que la paz se ve mejor si está escrita con filigrana de oro y la sobrevuela una paloma blanca con una ramita de olivo en el pico. Creía todavía que la paloma era el símbolo de la paz porque es un pájaro que se encuentra en todos lados, pero poco a poco me he convencido que es más bien como el oro: un bien muy escaso que pocos disfrutan. La Paz, con mayúscula y artículo definido, ha sido el sueño y empeño de mujeres y hombres reconocidos como: Ho Chi Minh,  Mahatma Gandhi, María Zambrano, Martin Luther King o Virginia Woolf.  Pero también ha sido, y sigue siendo, el sepulcro y trabajo de hombres y mujeres desconocidas que anhelan dejársela a sus hijos como la mejor herencia.

Marcha por la paz